Comer sin hambre para saciar otros vacíos. dulces-ansiedad Cuántas veces nos encontramos a nosotros mismos frente al televisor, ordenador,etc. terminado esa última galleta del paquete y ¡HORROR!, nos preguntamos: pero,¿porque estoy comiendo si no tengo hambre?
  chump1[1] Hola MANU:

Soy Matilde, amiga de tus padres. Nos hemos visto en el pueblo alguna vez. ¿Te acuerdas?

Te quería contar algo que recuerdo de mi infancia.

Las tardes de invierno, metida en casa, viendo caer lluvia y a veces nieve... detrás de los cristales, oíamos la voz de mi madre llamándonos a los cinco hermanos para proponernos un  juego... "Vamos a aprender a cocinar BIEN, para comer BIEN”... ¡¡¡¡Genial!!!!, pensaba yo. Todos a la cocina entre harinas, huevos, sal... y también jamón y queso... ¡¡¡¡Qué rico!!!!!

    Campaña Día de la Nutrición

“COMER SANO ES DIVERTIDO, LA OBESIDAD INFANTIL NO”

El sobrepeso y la obesidad se definen como “una acumulación anormal o excesiva de grasa que supone un riesgo para la salud”. El objetivo de la lucha contra la epidemia de la obesidad infantil consiste en lograr un equilibrio calórico que se mantenga a lo largo de toda la vida. La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que existen aproximadamente 42 millones de niños con sobrepeso en todo el mundo: casi el 30% de los menores en edades comprendidas entre 2 y 17 años presentan sobrepeso. Causas del sobrepeso y la obesidad infantil:

foto verduras de hoja verde

Las verduras de hoja verde tienen un elevado contenido en agua y bajo contenido en grasas e hidratos de carbono. Por ello, son ideales para las dietas de adelgazamiento y para todas aquellas personas que presentan problemas de obesidad.

piramide ejercicio Datos estadísticos recientes revelan que en las tres últimas décadas se ha producido un fuerte aumento del sobrepeso y la obesidad en el conjunto de la población de la Unión Europea. La prevención podría ser el arma más eficaz si toda la población adaptara sus estilos de vida a las recomendaciones. Por ello, es muy importante que durante la infancia y la adolescencia se establezcan unos hábitos dietéticos y de actividad física que puedan marcar una diferencia entre una vida sana y el riesgo de sufrir enfermedades en los años posteriores. ¿Y cuáles son esas recomendaciones?