Prevenir la osteoporosis

La osteoporósis es una enfermedad de los huesos caracterizada por la disminución de la masa ósea con alteración en la microarquitectura de los huesos y esto nos lleva a una mayor fragilidad ósea y una mayor facilidad para la presentación de fracturas.

La remodelación ósea (formación y resorción) es un proceso de renovación continuo del hueso que evita la acumulación de lesiones de fatiga y hace que se adapte a las necesidades mecánicas del momento. Y su equilibrio mantiene constante la masa ósea esquelética.

La osteoporósis se produce por un desequilibrio entre la formación y resorción ósea, con predominio de esta última, con influencia de variados factores en el recambio óseo.

Entre estos factores se encuentran:

  • Factores Genéticos.
  • Factores Hormonales.
  • Factores Nutricionales.
  • Factores Locales.

La osteoporosis es asintomática, hasta que aparecen las fracturas. Éstas surgen tras un pequeño traumatismo o espontáneamente. Afectan a cualquier hueso, presentando sintomatología según el lugar afectado. Las más frecuentes son las vertebrales, las del radio, de cuello del fémur, cadera y las de húmero.

Los factores de riesgo son:

  • Sexo: más frecuente en mujeres.
  • Edad: a partir de los 35 años.
  • Raza: se presenta mas en la raza blanca.
  • Enfermedades: hiperparatiroidismo.
  • Antecedentes familiares directos.
  • Escasa ingesta de calcio, ingesta inadecuada de vitamina D.
  • Consumo excesivo de tabaco.
  • Consumo excesivo de alcohol y café (más de 3 tazas al día).
  • Sedentarismo,
  • Poca exposición solar.
  • Delgadez, Obesidad.
  • Nuliparidad.
  • Medicamentos.

Ahora tocaremos el punto más importante de la osteoporósis y este es la PREVENCIÓN.
Desde la niñez se tiene que implementar este proceso hasta los 30 años:

  • Dieta rica en calcio.
  • Ejercicio físico adecuado.
  • Adecuada exposición solar (no abusar).
  • Evitar consumir café, alcohol, tabaco.
  • Nutrición adecuada y equilibrada
  • NO consumir dietas altas en proteínas, no abusar de las dietas vegetarianas (por su alto contenido de oxalatos), no consumo excesivo de sodio.

Nutricionalmente, las mejores medidas de prevención son la ingesta adecuada de calcio y de vitamina D de forma natural, que deben ser objetivos prioritarios desde la niñez. Se ha demostrado que la dieta rica en calcio mantiene un pico de masa ósea, aunque no haya seguridad de que pueda aumentarla, y que reduce la incidencia de fracturas de forma significativa. También es un hecho conocido que la dieta rica en vitamina D, junto con una exposición solar adecuada, es fundamental para la correcta absorción intestinal de calcio.

fuente  obesidad.net

Yolanda Del Moral
ydelmor@gmail.com