Por Marga Astasio, asesora de novaLine Mujer madura   Carmina nació y creció en un pueblecito de Galicia. Se alimentó muy bien, tomó mucha leche e hizo mucho ejercicio cuando era niña. Tras acabar sus estudios en la Universidad, se casó y tuvo dos hijos. Su familia y su trabajo en una oficina la mantenían muy ocupada y sin tiempo para practicar ejercicio. A los 48 años vino la menopausia. Un día, cuando tenía 70 años y estaba disfrutando de su jubilación, Carmina resbaló de una forma muy tonta al entrar en casa y se rompió la cadera. Se recuperó, pero a partir de aquí ya siempre necesito bastón para caminar. Carmina tenía osteoporosis, pero no lo sabía.