Una alternativa interesante, más de lo que muchos piensan, es tomar helado, un producto alimenticio apetitoso, refrescante y fácilmente digerible. Hoy día, gracias a las diversas técnicas de elaboración y a su composición nutritiva, los helados se pueden adaptar a todos los gustos (variedad de sabores, colores, texturas, ingredientes…) e incluso a necesidades especiales de algunas personas (helados apropiados en caso de diabetes, bajos en calorías para quienes necesitan cuidar su peso, etc.).