El sueño es uno de los indicadores clave de nuestra calidad de vida y los trastornos derivados de su falta constituyen, por su frecuencia y su repercusión en el bienestar general y psicológico, un grave problema sanitario en las sociedades modernas. Necesitamos descansar, dormir, más que otra cosa: sin dormir aguantaríamos muy poco. Además, el descanso que obtenemos del sueño debe ser reparador tanto a nivel físico como mental.
Se considera normal dormir una media de ocho horas diarias, aunque algunas personas requieren más horas y otras menos. Sin embargo, las estadísticas indican que la media real en los países desarrollados, como el nuestro, apenas supera las siete horas. Con la edad disminuye la necesidad de dormir, mientras que niños y adolescentes son
quienes más horas de sueño precisan.
28 febrero, 2012