05 May Nutrición en niños y adolescentes
Datos estadísticos recientes revelan que en las tres últimas décadas se ha producido un fuerte aumento del sobrepeso y la obesidad en el conjunto de la población de la Unión Europea. La prevención podría ser el arma más eficaz si toda la población adaptara sus estilos de vida a las recomendaciones. Por ello, es muy importante que durante la infancia y la adolescencia se establezcan unos hábitos dietéticos y de actividad física que puedan marcar una diferencia entre una vida sana y el riesgo de sufrir enfermedades en los años posteriores.
¿Y cuáles son esas recomendaciones?
1- Disfruta de la comida: Es importante intentar comer alimentos diferentes cada día para gozar de una alimentación variada. Las frutas y verduras deben formar parte de nuestro día a día así como los padres debemos ser un buen modelo asegurándonos de elegir opciones saludables a la hora de comer, procurando hacer, al menos, una comida al día en familia y no delante del televisor. No hay alimentos buenos y malos: simplemente se trata de encontrar un equilibrio, así que no vayas a restaurantes de comida rápida más de una vez a la semana.
2- El desayuno es una comida muy importante: Elige para el desayuno alimentos ricos en carbohidratos, como pan, cereales y fruta. Saltarse el desayuno significa estar menos concentrado en el colegio porque te faltará la energía que te aporta.
3-Practica ejercicio: Es la opción mas saludable para tener un corazón y unos huesos fuertes. Y procura ser constante. El ejercicio físico moderado te ayudará a quemar las calorías que te sobran. Debemos procurar dedicar tiempo a compartir actividades en familia y que los chicos jueguen al aire libre siempre que puedan.
4- Beber agua: La mejor forma de saciar la sed es bebiendo agua, al menos 6 vasos al día e incluso más si hace calor o se hace ejercicio. Deben evitarse las bebidas endulzadas, bebidas carbonatadas o que proporcionen energía.
5 – Basa tu alimentación en los carbohidratos: La pasta , el pan, los cereales, la fruta y las verduras deberían aportar más de la mitad de las calorías de tu dieta. Aportan vitaminas, minerales y fibra por lo que deberías intentar consumir 5 raciones al día de frutas y verduras. Y no debemos utilizar la comida como un premio o castigo. Por ejemplo, no ofrecer el postre como un premio por haber acabado la comida, puesto que con esta acción enseñaremos a nuestros hijos a valorar más los dulces que los demás alimentos.
Bibliografía:
– Problemas de peso en los niños, FamilyDoctor.org.
– Nutrición en niños y adolescentes, www.eufic.org.
– Obesidad infantil en España, Nutrición clínica y dietética hospitalaria.