Acumulación de grasa en la menopausia

La menopausia no es una enfermedad, ni un problema que deba preocuparnos, simplemente es el comienzo de una nueva etapa en la vida de la mujer.

Al finalizar la etapa fértil de la vida de la mujer, nuestro cuerpo sufre cambios que pueden afectar, no sólo a la salud, sino también al ámbito personal y social. Entender qué está sucediendo en nuestro cuerpo es un importante paso para asumir esta nueva etapa con naturalidad y sin miedos.

A medida que envejecemos es posible notar que mantener nuestro peso habitual se hace más difícil.

Uno de los síntomas de la menopausia es la hinchazón de vientre. Esta ocurre por la reducción de estrógenos y progesterona en el cuerpo. Los niveles de estas hormonas afectan tanto a la acumulación de grasa como el equilibrio osmótico de la hormona antidiurética, por lo que se produce una mayor retención de agua.

Muchas mujeres aumentan su peso de media entre 5 y 10 kilos en la transición de esta etapa sino se establecen estrategias preventivas adecuadas.  El descenso de estrógenos en nuestro organismo produce un aumento de los adipocitos (células que almacenan la energía en forma de grasa). Además, nuestro metabolismo se vuelve más lento, las calorías o energía que se gastan a diario para realizar el metabolismo basal, corresponde aproximadamente al 75 por ciento de las ingeridas, por lo que nuestro cuerpo necesitará menos energía para mantenerse. De ahí que comiendo lo mismo que antes, nos engorde más.

La menopausia cambia la composición corporal y la distribución de la grasa. en nuestro cuerpo. Los cambios hormonales nos predisponen a aumentar de peso en la zona del abdomen y cintura más que en las caderas y los muslos.

Muchas mujeres de mediana edad pasan de tener un cuerpo en forma de pera (con más peso por debajo de la cintura) a un cuerpo en forma de manzana (más peso por encima de la cintura).

 

Asimismo, disminuyen la masa y el tono muscular y aumenta la flacidez en brazos y piernas, sobre todo si no realizamos ejercicio físico

El problema con la grasa del vientre es que no se limita a la capa extra de relleno ubicada justo debajo de la piel (grasa subcutánea). También incluye grasa visceral, que se encuentra en el interior del abdomen, alrededor de los órganos internos.

La grasa subcutánea es la grasa abdominal que puedes sentir si pellizcas el exceso de piel y tejido en la parte media de tu cuerpo. La grasa visceral es la grasa abdominal que se acumula en el abdomen en los espacios entre los órganos. El exceso de grasa visceral se relaciona estrechamente con un mayor riesgo de sufrir problemas graves de salud.

 

Aunque la grasa subcutánea plantea problemas estéticos, la grasa visceral está relacionada con problemas de salud mucho más peligrosos, entre ellos:

  • Cardiopatía
  • Diabetes tipo 2
  • Presión arterial alta
  • Colesterol anormal
  • Problemas respiratorios
  • Osteoporosis u osteartritis

 

Un estilo de vida saludable puede ayudarnos a controlar los síntomas de la menopausia y reducir el riesgo de padecer estas enfermedades.

  • Si fumas, deja de hacerlo para reducir los riesgos para la salud a largo plazo.
  • Haz ejercicio con regularidad. Estar activa ofrece beneficios tanto físicos como emocionales.
  • Una alimentación saludable debe ser nuestra prioridad. No solo nos sentiremos mejor, sino que también podría prevenir problemas de salud.
  • Presta atención a cómo te afecta el aspecto emocional la menopausia. Cuenta con un sistema de apoyo. Busca ayuda si lo necesitas.
  • Asegúrate de obtener suficiente calcio y vitamina D. Consume alimentos ricos en calcio. Esto puede ayudar a reducir el riesgo de osteoporosis. La cantidad de calcio y vitamina D que necesitamos depende de la edad, salud y la cantidad de calcio que obtenemos con los alimentos que ingerimos.

 

Bibliografia:

– El camino hacia la menopausia. Mark Ranson

www.sportlife.es

https://newsnetwork.mayoclinic.org/

– www.quironsalud.es

Noelia Llorente
n.llorente@novadiet.es